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30 de julio de 2007

Duelo en la alta cima 2007

El año pasado me había acercado con IP y FD a la Haute Cime de los Dents du Midi. Había sido una expedición a saco, porque FD está muy fuerte e IP es un picao, pero a mí me había gustado mucho el sitio y me había quedado con ganas de volver. La gente andaba hablando de hacer algo el fin de semana y a mí se me ocurrió proponer ir a Susanfe a dormir y subir el domingo al pico. La gente respondió positivamente aunque se alzaron algunas voces discrepantes, algunos preferían dormir en tienda, otros en el refugio, otros querían escalar, otros hacer una hoguera, etc...

Al final con diálogo, consenso y un poco de chorra (encontré una zona de escalada más o menos cerca de donde íbamos) salió un plan que satisfacía a todos los implicados. El grupo incluía dos italianos hispanoparlantes, un canadiense pro-lentejas, un aragonés, tres catalanes y el que subscribe. Nos dimos un buen tute de andar, subimos al refugio, nos encontramos los andarines con los escaladores a mitad de subida, cenamos lentejas y gnocchis en la terraza del refugio, cantamos el tractor amarillo e intentamos dormir. A la excepción de MM, todos los demás dormimos fatal, pero MM domina el arte de dormir en cualquier circunstancia, nada le detiene.


A la mañana siguiente empezamos a a caminar hacia el pico a las 8 de la mañana. La cumbre se veía cubierta de nubes. Cuando estábamos en la arista del pico, un viento frío les quitó las ganas de subir a M y E, con lo cual, yo, que había sido nombrado capitán de la expedición, decidí abandonar la subida y poner a salvo a las dos elementas. Después de reunirnos en el refugio con los vencedores de la cumbre, el Sr. Vatios tuvo la idea de cocinar más lentejas y pasta. Estaban buenas, pero costó metérselas para dentro. Tras recoger el tinglado, empezamos el descenso hasta el chalet de Bonavau, donde tomamos unas boissons y nos despedimos de los escaladores, que debían volver a subir un rato para luego bajar a dónde habían dejado el coche. A las diez de la noche dejé en Gva a mis compis de expedición y llegué a casa muerto. Hoy echo de menos las lentejas. Las fotos están en flickr y , por supuesto, mi actor favorito también tiene algo que decir.

1 comentario:

Anónimo dijo...

dear saint tortillo,

I have just seen your flicker face,
and an article in El País about the unforgiven Mt. Blanc reminded me about our days back at Chamonix.

get a hug